Insfrán y su maquinaria de poder: la reforma constitucional que desafía a la Corte Suprema

En un movimiento que exhibe su habilidad para sortear límites, el gobernador Gildo Insfrán aprobó una reforma constitucional mediante su mayoría en la Legislatura provincial. Este polémico avance se concretó antes de que la Corte Suprema de Justicia fallara en contra de la reelección indefinida, sistema que ha sostenido su control durante más de tres décadas.
Aún no se ha definido la fecha para elegir a los convencionales que modificarán la Constitución vigente desde 2003, pero el escenario ya está teñido de estrategias políticas.
Todos llorando por Venezuela y acá tenemos a nuestro propio dictador, Gildo Insfrán, quien anoche logró la sanción en diputados para reformar la Constitución y perpetuarse en el poder por VEINTINUEVE AÑOS.
— Carla (@KrCarlit) October 25, 2024
Liberen a Formosa!! pic.twitter.com/1KUdxcRVgc
Mientras se especula sobre un posible desdoblamiento de las elecciones para facilitar su maquinaria electoral, el oficialismo despliega su conocida táctica de mezclar comicios provinciales con la votación nacional, maximizando así su control sobre el proceso.
En este contexto, la oposición busca articularse como un bloque unido, aunque la desventaja es evidente frente a un sistema diseñado para perpetuar el poder oficialista. La ley de lemas, históricamente utilizada por Insfrán para asegurar victorias, ahora se perfila como una herramienta que podría usar la oposición en Clorinda, una ciudad que enfrentará elecciones extraordinarias tras la muerte del intendente reelecto en 2023.
Sin embargo, los verdaderos planes del gobernador parecen ir más allá. Según sospechas de la oposición, la reforma constitucional podría incluir cláusulas que prohíban la reelección indefinida, pero solo a partir de futuros mandatos. De este modo, Insfrán tendría margen para postularse nuevamente en 2027 y 2031, consolidando aún más su hegemonía política.
Mientras tanto, la posibilidad de una intervención federal, que podría ser un recurso legítimo para frenar estas maniobras, sigue sin concretarse. Aunque existen intentos aislados de denunciar la situación ante el Congreso, la Justicia provincial, percibida como el pilar más fuerte del poder de Insfrán, permanece intacta bajo su influencia.
Este escenario deja al descubierto cómo las tácticas del oficialismo en Formosa continúan desafiando no solo las instituciones democráticas, sino también la paciencia de una ciudadanía que enfrenta un régimen consolidado y resistente al cambio.