¿Para qué quieren leer? Yo les voy a leer. Para qué quieren trabajar en lo privado, yo les voy a poner las empresas, para qué quieren otro, si acá estoy yo. Nadie puede con ustedes más que yo, si no soy yo, no es nadie.

Y cuando yo me vaya, ya veremos cuando yo me vaya, el tiempo me dirá qué decisión tomar con ustedes. Mientras tanto, acá me tienen, ¿para qué quieren más? ¿Qué quieren cambiar?

Podría ser una tranquila reflexión de Insfrán en sus adentros o para con sus más fieles allegados, porque realmente está convencido de su misión divina, de su condición de dios para guiar a un pueblo hacia la Tierra Prometida. Sucede que esa Tierra Prometida hace rato que no llega, y siempre hay postergaciones.

Por eso en los libros que van a distribuir en las escuelas primarias, van a enseñarles a los chicos que el Modelo Formoseño es un hito clave de la historia, que la llegada de Insfrán al poder transformó para siempre a Formosa.

Lo cual, siendo objetivos, es verdad. Ahora, si esa transformación ha sido positiva o no, ya es tema de otro análisis.

Pero es raro que la historia la escriban quienes están todavía caminando por estas tierras, es poco objetivo y no es saludable. ¿Qué van a aprender los chicos en la primaria? ¿Que solamente el gildismo ha sido positivo para Formosa?

¿Que no hubo nunca un político tan completo como él? ¿Que sin el Modelo Formoseño que hizo Gildo Insfrán ninguno de ellos tendrían posibilidades de nada?

¿Que el éxodo de muchachitos y muchachitas, y luego de familias enteras, no era más que un grupo de cipayos, vendepatrias, malnacidos que no quieren a Formosa? ¿Que bombolo es aquel que no piensa como lo indican los decidores de Insfrán? ¿Que son retrasados mentales los políticos que critican al Gobierno?

Es muy peligroso hacerle creer a un niño que eso que está escrito ahí es la verdad indiscutible, y que no sepa el niño que su docente está amenazado con perder el trabajo si acaso llegase a mostrar un poco de disconformidad con algunas líneas, o que sus padres, dependiendo de la situación de cada uno, podrían quedarse en la calle, dependiendo de lo que escriban o digan en las redes sociales.

Los manuales de Ciencia Social que se están repartiendo en las escuelas son de adoctrinamiento desde el momento en que no reconocen la existencia de otros actores más que meros odiadores del Modelo Formoseño, que no es más que un cúmulo de ideas tiradas al aire pero que no encierran ninguna filosofía extraordinaria, es una palabra decorada que no hace la diferencia con nada...

Así como existe el Modelo Formoseño, podría existir el Modelo Neuquino, el Modelo Salteño, pero claro, en esos lugares la democracia es más sana, y no son pretensiosos para arrogarse semejante mote para algo tan mundano como gobernar como debería ser…

Entre las consignas se puede leer: "Preguntale a un adulto cómo era Formosa antes de 1995 (día en que llegó Gildo Insfrán al poder) y cómo fue después". Hasta les piden a los chicos que dibujen y reflexionen sobre cómo era antes Formosa a lo que es hoy.

Luego hay un repaso sesgado de la historia mostrando solo los “logros” vinculados al peronismo, al gildismo, dejando de lado todo lo que no “cuadre” con la historia.

Los diputados del bloque de la oposición, como Gabriela Neme, Juan Carlos Amarilla, Miguel Montoya, Agostina Villaggi, Carla Zaizer y Ana Costa, denunciaron en sus redes esta situación y llaman a los padres de los alumnos a hacer respetar la ley de educación nacional y denunciar ante el organismo que corresponda este tipo de situaciones.

“La niñez no es una prioridad para el gobierno de Insfrán, el gildismo se mete con la educación pública con el único fin de adoctrinar desde la primaria hasta la universidad de Laguna Blanca”, dijo Neme.

“Diputados del gildismo aprobaron un cuadernillo de Ciencias Sociales que se reparte en las escuelas de la Provincia el cual contiene material político partidario y una clara bajada de línea en favor al Gobierno de Insfrán”, comentó el bloque de los diputados opositores.